jueves, 6 de diciembre de 2012

¿Nubes?


¿Nublado? La primera cosa que veo ya son unas desesperantes nubes cuya única presencia provoca escozor en mis ojos. Hermosa forma de empezar el día. Las nubes postreras tras las ventanas amenazan y parecen bailar el macabro son del viento. 


Ha sido un día cansado, como los otros. Cómo no. Esto ya huele. Se hace monótono.
Deberes vacíos pero llenos de tiempo perdido. Muchos dirán “Jo, qué razón, estudiar es un ladrillo” pero para mí no es que sea un ladrillo, todo lo contrario, me encanta, pero últimamente no saco tiempo para tan gratificante tarea. Y qué risa el tiempo libre. No he leído una página desde que empezamos el curso, literalmente. Esperemos que pronto todo siga su cauce NORMAL, no bueno ni malo, pero mejor seguro, sólo un poquito de normalidad, aunque las nubes pastosas parecen vigilantes desde arriba por hacernos infelices.
Hoy a primera ha habido sociales, clase pre-examen, aunque no lo ha parecido, hemos hecho una clase normal, y como es normal, sin percances.
A segunda tocaba mates, paciencia señor, aunque hoy por lo menos no ha habido cálculo. Se hace más divertido con Inge.
A tercera, lengua, como no, a avanzar la aparentemente interminable descripción. En mi atolondramiento me pareció que era para hoy . Yo y mis despistes, que, junto con mis manías y mi impuntualidad son las cosas que harán perder la paciencia a más de uno de mis compañeros y, espero que no, las delicias de las burlas.
En el recreo ya lo veo todo pixelado, y maldigo a Seurat, que también se podría haber dedicado a la agrimensura o a hacer pajaritas de papel, el Seurat, de tanto hacer puntitos, --------- puntitos, estoy ya hasta las mismísimas narices de puntitos, para un trabajo de malditos puntitos, ya se podrían ir a hacer gárgaras los puntitos de plástica. Me cachis en los puntitos y el puntillismo y en Seurat.
A cuarta en plástica toca seguir enfrentándose a los puntitos, tras un comentario sin gracia sobre mi dibujo por parte del profesor, mejor no me emociono, y para colmo el siguiente tema son las rayitas, que díver, a ver a qué maldito pintor famoso de la especialidad me toca maldecir ahora.
Ahora francés con “Sandgá”, y verbos y adjetivos que son lo que estamos haciendo últimamente. No se me ocurre nada más.
A quinta, perdón a sexta, estaba alargando las clases para colmo, toca prueba de resistencia, y al terminar hay que andar cuidadoso para no ir pisando pulmones y tráqueas desparramados por el suelo.
Ya por fin en casita, con el agradable pensamiento de que me quedan cuatro horas de conservatorio por delante, cinco entradas incompletas de diario, los deberes de matemáticas, inglés y francés, y prepararme dos exámenes. Pero pese a eso uno sale contento pensando en que ya han acabado las clases. Ya no hay casi nubes en el cielo.




2 comentarios:

  1. Precioso, Carmen. Me ha gustado un montón, enhorabuena ;))))

    ResponderEliminar
  2. Carmen me encanta tu entrada! ¡Tenemos muchas cosas en común! Por cierto a mi también me gustan más las mates con Inge (:

    ResponderEliminar